Desayuno (Mañanas)

Como cualquier sábado, el Gran Comedor estaba casi vacío a esa hora. Eran las 12:31 antes del medio día y los platos con los desayunos iban apareciendo a medida que algún alumno se acercaba a las grandes mesas de las cuatro casas. Los fines de semana, cualquier chico podía sentarse en la mesa de otro de otra casa distinta para intercambiar opiniones y deberes sin que nadie le prestara la más mínima atención, ahora fuera de competiciones entre semana. Además y por si fuera poco, aquella tarde comenzarían a regresar -como cada cuatro años- los alumnos de las otras dos Escuelas de Magia que se unían para celebrar el Gran Torneo de los Tres Magos, una competición legendaria que proporcionaba la gloria y la entrada en la historia mágica de todo aquel que consiguiera ganarla.Cosa, todo hay que decirlo, nada fácil para los alumnos que lograban entrar en ella puesto que las pruebas eran cada vez más extrañas y difíciles.

Aquella mañana, Grace devoraba las tostadas con mermelada de calabaza como si fueran las últimas que fuera a comer en su vida, el esfuerzo la hacía parecer famélica. Estaba muerta de hambre.

-Nena, si no comes más despacio vamos a tener que ir dentro a la enfermería dentro de un rato, así que relájate mujer que nadie te va a quitar esas tostadas -le dijo Sylvia que estaba tomando un tazón de té de menta tan caliente que el vapor ascendía hasta el techo confundiéndose con el que emanaban las velas recién apagadas.
-¡Eg que ni teh imaginaz el hambre que engo! -le respondió ella con la boca llenísima.
-Creo que me lo puedo imaginar -respondió ella haciendo una mueca de asco justo cuando se le caía un poco de mermelada encima de los pantalones llenos de barro -Pero aún así...
-¡Joder, déjala comer, Syl! Y mejor cuenta, ¿cómo han ido las pruebas? Estuvimos viendo algo desde la ventana de la torre de Gryffindor. Odio cuando el prefecto se pone imbécil, ¡maldito pesado! Podríamos haber adornado la Sala Común más tarde -gritaba Zara mientras le daba un bocado a unos buñuelos de nata -Yo quería haber ido a verte para animarte y eso.
-Ezo hubiera jido eztupendo. Aunque igual me hubiera puegto máz nervioza, y creéme, ya egtaba baztante nervioza -tragó la tostada con cara de dolor.
-Seguro que te pillan, tía, ¡ya lo verás! Ya te veo esquivando las bludgers y metiendo la quaffle en el aro -Zara cogió un bollo enorme y se lo metió bajo el brazo simulando una quaffle, se levantó, dió dos giros como si esquivara un par de bludgers locas y la tiró con fuerza hacia el otro lado del Gran Comedor, sin saber a dónde iría a caer...

Entré en el comedor de buen humor, algo tarde, pero tras pasar el dia anterior entrenando toda la tarde hasta la noche, me sentó muy bien las 10 horas que me pasé durmiendo. Según me acercaba a mi mesa, no se por qué me dio por mirar a mi izquierda, y me vi un bollo enorme venir directo a mi cabeza. Me eché al lado justo a tiempo para esquivarlo, y siguió su camino, pero vi quien lo lanzó, y me dirigí hacia la chica de Gryffindor culpable.

-Disculpa, ¿te he hecho algo, o eso no iba para mi?

-No, no iba para tí, a no ser que fueras un aro de quidditch -Zara miraba alrededor como si el Gran Comedor fuera el Estadio de las Harpías, lleno de gente que la admiraba por haber marcado un tanto.
-No le hagas caso, está algo... -hizo un gesto con el dedo -chiflada -Grace le sonrió al chico y le invitó con la mano a que se sentara para desayunar -Si quieres puedes desayunar con nosotras, te prometo que mantendremos a Zara lejos de los bollos.

Acepté y me senté con ellas, al lado de la que me lanzó el bollo

-Pues si quieres darme con una cosa asi, tendrás que entrenar mas para darle al cazador de ravenclaw ^^

Entré al GC a desayunar.
No tenía mucha hambre porque la noche anterior me había inflado a ranas de chocolate y ahora me dolia un poco la tripa.

Me senté en mi mesa y cogí el zumo, el que casi se me cae cuando la puerta del GC se abrió y entraron un montón de alumnos de otro colegio.

Los alumos de Durmstrang y las chicas de beauxbatons entramos al comedor acompañados de nuestros profesores que también iban a quedarse a ayudar en Hogwarts durante el curso. Rápidamente Dumbledore se puso en pie para dar la bienvenida a los nuevos alumnos.

- Alumnos de Durmstrang y Beauxbatons, es un gran honor para todos poder teneros aquí en Hogwarts este curso.
Este curso, como todos sabéis, no es un curso cualquiera.. aunque de eso hablaremos más tarde.
De momento os distribuiremos por las cuatro casas de Hogwarts siguiendo el ritual que utilizamos aquí: El Sombrero Seleccionador.
El Sombrero mirará en vuestro interior y os indicará la casa a la cual perteneceréis durante toda vuestra estancia aquí. Espero que os llevéis bien con vuestros nuevos compañeros y aprendáis mucho de ellos. Acto seguido empezará la ceremonia, conforme vayáis siendo elegidos ya podéis dirigiros a la mesa de la casa que tengáis asignada.

[- Había oído hablar del sombrero seleccionador pero nunca imaginé que acabaría probándolo.. de todas formas ya se donde me tocará.]

Grace, pensativa se quedó mirando a Alex mientras imaginaba cómo se enfrentaban en el primer partido de la temporada. No, era muy difícil que la admitieran. Aún así se permitió soñar cómo le arrebataba la quaffle al gran cazador de Ravenclaw y salía en brazos de sus compañeros por la puerta del estadio tras haber ganado el partido.

En el Gran Salón el bullicio era ya insoportable por las voces de los alumnos que habían llegado desde todas partes del castillo para ver a los nuevos alumnos que les acompañarían durante el curso. Alumnos más interesantes que los ya acostumbrados compañeros por ser extraños y de costumbres diferentes, recatadas y elegantes en el caso de las señoritas de uniforme azul cielo -todas más bellas de lo que Grace había podido imaginar jamás- en contraste con la rudeza y el atractivo de los chicos del norte que venían acompañados del mismísimo Karkaroff, un mago legendario según las malas lenguas.
Poco a poco se fueron haciendo hueco en las mesas de las casas para acoger a los nuevos alumnos extranjeros a medida que fueran siendo seleccionados. Las chicas francesas reían mirando a los chicos noruegos mientras los de Hogwarts miraban con estupor las decisiones del Sombrero...


-¡Hufflepuff! .... -el Sombrero Seleccionador iba gritando por encima de las voces de todos -¡Gryffindor! .... Este tal vez... ¡Ravenclaw! ... Tú serás un gran ¡Slytherin!

Al decir esto último Grace miró al chico que se bajaba del atrio para ir a la mesa opuesta en el Gran Comedor y no le gustó demasiado lo que vió. Su mirada era rara y se estremeció al ver que la cruzaba con la suya.

"Más vale tener cuidado con los nuevos"



[ Sigue en Sala Común General -Noche]

- Slytherin!!!

El sombrero grito mientras estaba sentándome, ni siquiera se me había acercado.

- Venga ya, se supone que debo ponérmelo.

Mira a la profesora que debía ponérmelo en la cabeza haciéndole una señal para que accediera.
La profesora me puso el sombrero pero mientras este se acercaba a mi cabeza no paraba de gritar el nombre de Slytherin una y otra vez.

- Tendré que hacerle caso entonces.

Mientras bajaba del atrio mi mirada se cruzó con la de una chica vestida de rojo, tendría que ser una Gryffindor..

El chico de Durmstrang que acababa de ser seleccionado para mi casa se dirigia a la mesa.
Le miré de arriba a abajo, parecia... interesante.
Bebi un trago de mi zumo y vi como el chico se sentaba a mi lado.

- Bienvenido - dije en tono "amable" y seguí desayunando

Me senté en el primer sitio vacío, donde me esperaba una pelirroja de ojos verdes muy peculiar, o eso adivinaría más adelante.

- Así que esto es Slytherin eh.. espero que sea digna de lo que hablan.
Me llamo Riku.. Riku Ryddle.

- Kate Wood y estás en la mejor casa, eso no lo dudes

Le pasé la jarra de zumo por si queria

- ¿Qué es lo que has oido de Slytherin?

Acerqué mi vaso para que me sirviera.

- Muchas cosas: inteligencia, fuerza, superioridad.. al parecer se olvidaban de la belleza.

Deje la jarra en la mesa sin servirle

- Y al parecer no te han mencionado que no somos los sirvientes de nadie, sino al contrario

- Oh, entonces veo que lo de inteligentes no era cierto..

Me serví un poco de zumo.

Le miré mal

- ¿Por qué lo dices?

Vi como llegaban a la mesa Steve, Jack, John y Hazel

¿Dónde estará Tom?

Di otro trago de zumo

- Porque no os iría nada mal a los de Hogwarts llevaros bien con nosotros los de Durmstrang, así aprenderíais un poco de Artes Oscuras.

Levanté la jarra y le ofrecí.

- ¿Quieres un poco más?

- Nadie a dicho que no vayamos a llevarnos bien, has sido elegido para mi casa, eso te convierte en alguien...Aceptable

Negué con la cabeza a lo del zumo

- ¿Qué clase de "Artes Oscuras" os enseñan alli? En teoria estan prohibidas...

- Para vosotros están prohibidas, nosotros la tenemos como asignatura común.. practicamos todo tipo de maldiciones.. todas menos las prohibidas claro.. eso no significa que extraoficialmente las pongamos en practica.

Me eché yo más zumo, estaba bastante bueno por cierto.

Volví a mirar la entrada, pero ni rastro de Tom.
Miré a Jack que entendió perfectamente lo que me pasaba y se encogió de hombros.
Volvi la vista a Riku

- Supongo que se te dan bien, si no, no hablarias asi de ello... ¿Qué quieres a cambio de enseñarme?

- ¿Qué podría ofrecerme una chica de Hogwarts?

Poco a poco todos los nuevos alumnos ya se habían terminado de colocar en sus nuevas casas.

- Di mejor qué no podria ^^

Me levante

- Es hora de irse, ya nos veremos

Salí del GC

[Sigue en SC Sly]

(sorry, pero ya es Lunes, asi que ya es por la tarde xD)